lunes, 25 de agosto de 2025

Impacto de los cultivos ilícitos y su procesamiento en el ambiente (suelo, agua y aire) y en la salud humana: una mirada crítica desde Colombia al mundo



Cada hectárea de coca sembrada en Colombia es una herida abierta en la tierra. No se trata solo de un cultivo ilegal, sino de un proceso que arrasa selvas, envenena ríos, intoxica el aire y pone en riesgo la vida de miles de familias. Mientras el mundo consume, nosotros pagamos el precio más alto: perder nuestros bosques amazónicos, contaminar las fuentes de agua de las que dependen pueblos enteros y exponer a niños y adultos a sustancias químicas letales.

Colombia está en el centro de una crisis ambiental silenciosa que crece con cada laboratorio improvisado en medio de la selva. Ácidos, solventes, combustibles y toneladas de químicos son vertidos a cielo abierto como si nuestro país fuera un vertedero del narcotráfico mundial. El suelo se vuelve infértil, los ríos dejan de ser fuente de vida y el aire se convierte en un enemigo invisible para quienes lo respiran.

El drama es claro: Colombia no puede enfrentar sola esta destrucción. El narcotráfico es un mercado global, y su impacto no reconoce fronteras. Si las potencias no asumen la corresponsabilidad, no solo estaremos perdiendo ecosistemas únicos, sino también cualquier posibilidad de detener una catástrofe ambiental y sanitaria de proporciones incalculables.


Colombia no puede sola



Hablar de cultivos ilícitos es hablar de un fenómeno que devora bosques, envenena ríos, deteriora suelos, contamina el aire y pone en riesgo la salud de millones, mientras alimenta economías criminales transnacionales. Colombia —históricamente el país con mayor extensión de cultivos de coca según el sistema de monitoreo SIMCI— carga con la cara más costosa de la cadena: la degradación ambiental y la violencia territorial. El país necesita respaldo financiero, tecnológico y militar efectivo de las potencias para romper el ciclo de producción y procesamiento que sostiene este mercado global. Ministerio de Justicia

La propia Política Nacional de Drogas 2023–2033 reconoce que por décadas Colombia ha asumido un gasto humano y económico enorme en la lucha contra el narcotráfico y que la cooperación internacional es un pilar para lograr resultados sostenibles. Ministerio de Justicia


Suelo: pérdida de fertilidad, erosión y tóxicos persistentes

Deforestación y cambio de uso del suelo

La expansión de la frontera agrícola para coca derriba selvas, abre trochas y desencadena erosión. El IDEAM ha documentado la relación entre cultivos de coca y núcleos de deforestación, especialmente en la Amazonia y la Orinoquia. Sus boletines de Detección Temprana de Deforestación (DTD) muestran concentraciones reiteradas de alertas en departamentos como Caquetá, Guaviare, Meta y Putumayo. bart.ideam.gov.coideam.gov.co

El IDEAM informó además que en 2023 la deforestación nacional se redujo 36% frente a 2022 —la cifra más baja en 23 años—, avance que sigue siendo frágil ante los motores ilegales, entre ellos la coca. Este dato es clave para explicar que los logros ambientales requieren acciones sostenidas y apoyo internacional para neutralizar los factores criminales. ideam.gov.co

Suelo envenenado por químicos del procesamiento



El procesamiento de base de coca y clorhidrato utiliza ácidos fuertes (clorhídrico, sulfúrico), solventes (gasolina, acetona, éter), oxidantes (permanganato de potasio) y otros insumos que, mal dispuestos, se infiltran en suelos y cuerpos de agua, alterando pH, microbiota y ciclado de nutrientes. La Dirección de Antinarcóticos y el Ministerio de Justicia mantienen control administrativo sobre sustancias y productos químicos porque varios son esenciales en la fabricación ilícita y su manejo inadecuado tiene impactos severos. Ministerio de Justicia+1

El Consejo Nacional de Estupefacientes unificó desde 2015 la normatividad para controlar estas sustancias (SICOQ, CCITE, listados y controles), precisamente por su desvío hacia laboratorios clandestinos. Esta arquitectura regulatoria es evidencia del riesgo ambiental y sanitario asociado a su uso ilícito. Ministerio de Justicia+1Juriscol


Agua: ríos convertidos en vertederos químicos

Las mezclas usadas para maceración, extracción y refinamiento se desechan a cielo abierto, alcanzando quebradas y ríos. La Policía Nacional ha advertido que, además del potencial productivo de las sustancias incautadas, su vertimiento a corrientes de agua causa mortalidad de especies acuáticas y daño a ecosistemas completos. Este punto funciona muy bien en SEO (“contaminación del agua por laboratorios de coca”). policia.gov.co

En paralelo, los reportes del ODC/MinJusticia con base en SIMCI permiten localizar municipios con presencia de coca y priorizar control de precursores, reduciendo así la carga de vertimientos tóxicos. Este enfoque territorial es esencial para planear inversiones ambientales (saneamiento y remediación) y acciones de seguridad. Ministerio de Justicia


Aire: emisiones, quemas y riesgo para comunidades

En laboratorios clandestinos se realizan evaporaciones y quemas de solventes y combustibles (gasolina, keroseno) sin ningún control, generando compuestos orgánicos volátiles (COV) y aerosoles ácidos irritantes. Aunque medir estas emisiones es difícil por su clandestinidad, el marco de control de sustancias del MinJusticia y los manuales de toxicovigilancia del INS subrayan que tales compuestos, por inhalación o contacto, plantean riesgos agudos y crónicos para trabajadores y poblaciones cercanas (irritación respiratoria, cefaleas, efectos neurológicos). Ministerio de Justiciains.gov.co


Salud humana: intoxicaciones, lesiones y efectos crónicos

La vigilancia de intoxicaciones químicas en Colombia está a cargo del Instituto Nacional de Salud (INS). Sus manuales y boletines técnicos describen la toxicidad de sustancias corrosivas y solventes, y han desarrollado lineamientos para SIVIGILA en exposición a químicos. En territorios con presencia de laboratorios, el riesgo no es sólo ocupacional: familias y niños están expuestos por agua, aire y suelo contaminados. ins.gov.co+1

Además, el Observatorio Nacional de Salud ha documentado cómo el conflicto y las economías ilegales deterioran determinantes de salud (acceso a servicios, nutrición, seguridad), con efectos acumulados en morbilidad y mortalidad, lo que refuerza el argumento de que los cultivos ilícitos son un problema ambiental y de salud pública. ins.gov.co


Magnitud y dinámica: datos oficiales para dimensionar el problema

  • Monitoreo de coca (SIMCI/ODC): Los informes más recientes permiten georreferenciar la presencia de cultivos y “clústeres” de producción en departamentos históricos. Esta información oficial es la base para priorizar operaciones, inversión social y restauración ambiental. Ministerio de Justicia+1

  • Deforestación (IDEAM/SMByC): Los boletines DTD 2023–2024 identifican núcleos de pérdida de bosque y permiten inferir presión asociada a economías ilegales. Son insumos críticos para políticas de cero deforestación y para orientar pagos por servicios ambientales. ideam.gov.co+1

  • Control de precursores (MinJusticia/Policía): La existencia de listados y permisos (SICOQ, CCITE) demuestra que el Estado colombiano entiende los precursores como vector ambiental y sanitario cuando son desviados a laboratorios. Ministerio de Justicia+1


¿Por qué Colombia necesita apoyo militar y económico internacional?

a) El mercado es global; la carga ambiental es local

El propio MinJusticia señala que el aumento de la demanda en Norteamérica y Europa presiona a las zonas productoras. Mientras los beneficios del mercado se capturan fuera, el pasivo ambiental —deforestación, contaminación y costos en salud— queda en los territorios colombianos. Por eso, la corresponsabilidad internacional no es un favor: es un principio de justicia ambiental. Ministerio de Justicia

b) Costos y capacidades

La Política Nacional de Drogas 2023–2033 deja claro que la lucha antidrogas ha sido costosísima y que se requiere cooperación financiera y tecnológica sostenida para:

  1. inteligencia e interdicción de insumos y rentas criminales;

  2. restauración ecológica (suelos, riberas, humedales y bosques);

  3. agua y saneamiento para poblaciones afectadas;

  4. transición productiva con cadenas legales competitivas; y

  5. justicia y protección comunitaria. Ministerio de Justicia

c) Instrumentos concretos

  • Apoyo en control de precursores y trazabilidad química (mejoras al SICOQ, analítica forense, sensores en ruta, verificación en frontera). Juriscol

  • Cooperación para restauración basada en ciencia (financiar planes de recuperación en áreas con cultivos), enlazando datos IDEAM–ODC para priorizar. ideam.gov.coMinisterio de Justicia

  • Seguridad territorial y protección de parques (apoyo logístico y tecnológico para blindar áreas protegidas frente a la apertura de nuevos lotes de coca y la instalación de laboratorios). Parques Nacionales Naturales de Colombia


Ruta de solución: lo que funciona (y cómo medirlo)

  1. Cortar la cadena química: fortalecer controles y auditorías en puertos, carreteras y comercio de sustancias controladas; mejorar los permisos (CCITE) con análisis de riesgo geográfico (departamentos SIMCI con alta incidencia), y tecnificar rutas de decomiso seguro y disposición para evitar que el remedio contamine más. Ministerio de Justicia+1

  2. Blindaje de cuencas y restauración acelerada: con mapas de DTD-IDEAM priorizar subcuencas críticas; financiar biorremediación de suelos ácidos y oleosos (derivados de solventes), estabilización de taludes y recuperación de conectividad ecológica. ideam.gov.co

  3. Salud pública activa: equipos territoriales con SIVIGILA para detectar intoxicaciones por químicos y exposición crónica; protocolos del INS para primeros auxilios tóxicos y vigilancia en escuelas rurales. ins.gov.co

  4. Transición productiva y mercados: apoyo internacional para encadenar agroforestería, cacao, caucho, café y bioeconomía; garantías de compra y logística para que el sustituto pague y llegue. (La Política de Drogas 2023–2033 incorpora este giro productivo y necesita músculo financiero externo). Ministerio de Justicia

  5. Indicadores y transparencia: tableros públicos que integren SIMCI (área de coca), IDEAM (alertas), ODC/Policía (precursores y laboratorios) e INS (salud). El éxito debe medirse tanto en reducción de coca y laboratorios como en recuperación ambiental y salud. Ministerio de Justicia+1ideam.gov.coins.gov.co


El mapa del daño ambiental por etapa de la cadena

Siembra y expansión

  • Tala, quema y drenaje de humedales; compactación de suelos; pérdida de carbono y biodiversidad. (IDEAM/DTD como sistema de alerta y cuantificación). ideam.gov.cobart.ideam.gov.co

Maceración y extracción

  • Uso de gasolina/keroseno y ácidos → lixiviación, descenso de pH, muerte de biota edáfica y acuática; exposición dérmica y respiratoria de peones y familias. (Antinarcóticos/MinJusticia sobre control de sustancias). Ministerio de Justicia+1

Refinamiento (base y clorhidrato)

  • Emisiones de COV por evaporación de solventes; residuos con permanganato y sales de manganeso; descargas a quebradas. (Policía Nacional advirtió mortalidad de fauna por vertimientos). policia.gov.co

Comercialización y “cocinas” móviles

  • Quemas in situ para borrar rastros; movilidad a nuevas áreas, reabriendo el ciclo de deforestación. (Cruce SIMCI-IDEAM para detectar “saltos” espaciales). Ministerio de Justiciaideam.gov.co


Parques y áreas protegidas: la última línea de defensa

Parques Nacionales Naturales (PNN) ha tenido que adelantar procesos sancionatorios y medidas para proteger áreas como Tinigua y Sumapaz ante afectaciones (tala, aperturas, usos ilegales). Blindar parques requiere presencia estatal y cooperación técnica y logística internacional (drones, sensores y vigilancia). Parques Nacionales Naturales de Colombia+1


¿Y si miramos el “lado demanda”? Corresponsabilidad real

El MinJusticia ha subrayado el aumento de la demanda en los grandes mercados como factor de presión sobre los clústeres productores en Colombia. Si el mundo quiere menos cocaína, las potencias deben reducir su consumo y golpear las finanzas del narcotráfico a través de regímenes AML/CFT (CONPES 4042 moderniza el sistema antilavado), decomisos patrimoniales y cooperación judicial. Ministerio de JusticiaColaboración


Un llamado desde Colombia

  1. La evidencia oficial colombiana (SIMCI/ODC, IDEAM/SMByC, Policía/Antinarcóticos, INS) prueba que los cultivos ilícitos y su procesamiento generan un daño ambiental multisistémico (suelo, agua, aire) con consecuencias sanitarias y territoriales. Ministerio de Justiciaideam.gov.copolicia.gov.coins.gov.co

  2. Colombia ha logrado reducciones de deforestación en 2023, pero ese avance está en riesgo sin una corresponsabilidad financiera, tecnológica y militar internacional. ideam.gov.co

  3. El control de precursores, la restauración de cuencas, la vigilancia en salud, la transición productiva y el blindaje de parques son líneas estratégicas que requieren fondos y capacidades de países potencia. JuriscolMinisterio de JusticiaParques Nacionales Naturales de Colombia


Desde Coral Infauna proponemos acompañamiento técnico para:

  • Diagnóstico ambiental rápido con cruce SIMCI–IDEAM para priorizar restauración.

  • Planes de biorremediación de suelos y riberas impactadas por químicos.

  • Monitoreo en salud (SIVIGILA local) y capacitación en manejo de emergencias químicas.

  • Diseño de proyectos bancables para cooperación internacional (verificación, indicadores, costo-beneficio).

¿Eres autoridad local, ONG o entidad internacional? Escríbenos: diseñamos y ejecutamos soluciones integrales para que Colombia deje de pagar sola el costo ambiental y sanitario del narcotráfico.

 

Bibliografía.

  • Observatorio de Drogas de Colombia – MinJusticia. Monitoreo de los territorios con presencia de cultivos de coca 2023 (UNODC–SIMCI, 2024) y series relacionadas. Ministerio de Justicia

  • MinJusticia. Política Nacional de Drogas 2023–2033: “Sembrando vida, desterramos el narcotráfico”. Ministerio de Justicia

  • MinJusticia. Control para el manejo de productos y sustancias químicas (Subdirección de Control y Fiscalización) y normatividad asociada (SICOQ/CCITE). Ministerio de Justicia+2Ministerio de Justicia+2

  • Consejo Nacional de Estupefacientes – MinJusticia. Resolución 0001 de 2015 (unificación de control de sustancias). Ministerio de JusticiaJuriscol

  • Policía Nacional – Dirección de Antinarcóticos. Comunicado sobre vertimiento de sustancias y publicaciones institucionales (impactos y control). policia.gov.co+1

  • IDEAM – SMByC. Boletines Detección Temprana de Deforestación 2023–2024 y Informe de Rendición de Cuentas 2024 (reducción 36% de deforestación en 2023). bart.ideam.gov.coideam.gov.co+1ideam.gov.co

  • Parques Nacionales Naturales de Colombia. Resoluciones e informes de gestión con medidas de protección en áreas protegidas (Tinigua, Sumapaz y otros). Parques Nacionales Naturales de Colombia+1

  • Instituto Nacional de Salud (INS). Manual de referencia para la Vigilancia de Intoxicaciones por Sustancias Químicas (lineamientos SIVIGILA) y reportes técnicos. ins.gov.co+1

  • DNP – CONPES 4042. Mejora del sistema antilavado y contra la financiación del terrorismo (componente clave para cortar rentas criminales). Colaboración



viernes, 22 de agosto de 2025

Metro elevado en Bogotá: ¿un error paisajístico irreversible? Comparativa con metros subterráneos globales

 


Cada vez que camino por Bogotá y observo las montañas al fondo, pienso en cómo el paisaje urbano de la capital convive con su entorno natural. La ciudad siempre ha tenido retos en materia de movilidad, pero también ha contado con la oportunidad única de construir soluciones que respeten tanto al ciudadano como al ambiente. Sin embargo, la decisión de construir un metro elevado en Bogotá amenaza con convertirse en un error histórico.

Más allá del entusiasmo político, debemos preguntarnos: ¿qué estamos sacrificando a nivel estético, ambiental y de ordenamiento territorial al optar por un sistema elevado en lugar de un metro subterráneo, como han hecho las grandes capitales del mundo?


El impacto paisajístico del metro elevado en Bogotá




Uno de los mayores daños que traerá la construcción de un metro elevado será la ruptura del paisaje urbano. Las gigantescas columnas de concreto que soportarán las vías no solo alterarán la estética de los corredores donde transite, sino que además:

  • Obstruirán vistas icónicas de la ciudad, incluyendo las montañas orientales y sus áreas de valor ambiental.

  • Generarán un efecto de saturación visual, convirtiendo avenidas en corredores oscuros y fríos bajo la sombra de la infraestructura.

  • Reducirán el valor paisajístico y arquitectónico de zonas residenciales y patrimoniales.

Bogotá es ya una ciudad congestionada visualmente; sumar una mole de acero y concreto en altura es profundizar el caos urbano, no resolverlo.


Ruido, contaminación y pérdida de espacios verdes




Los defensores del metro elevado suelen insistir en que es más barato y rápido. Pero ese “ahorro” tiene costos invisibles para la calidad de vida:

  • Los trenes en altura generan contaminación acústica permanente en barrios adyacentes, muy superior a la de un sistema subterráneo.

  • Las obras demandan derribar árboles y ocupar espacios verdes, fragmentando corredores ecológicos y reduciendo zonas de esparcimiento ciudadano.

  • Las comunidades vecinas quedarán sometidas a vibraciones y polución, un castigo que ninguna gran capital moderna se permitiría imponer en pleno siglo XXI.


Comparativa con metros subterráneos en el mundo




El contraste con lo que han hecho otras ciudades es evidente.

  • París: el metro subterráneo permitió preservar sus bulevares históricos y plazas sin alterar el paisaje urbano.

  • Londres: a pesar de la complejidad geológica y el altísimo costo, la ciudad apostó por el subterráneo, garantizando la conservación de su patrimonio cultural y arquitectónico.

  • Nueva York: el metro bajo tierra es la espina dorsal de la ciudad, evitando que el espacio aéreo y las avenidas se conviertan en junglas de concreto.

Todas estas ciudades comprendieron que el valor paisajístico, la calidad de vida y el ordenamiento urbano pesan más que la inmediatez económica. Bogotá, en cambio, parece haber escogido el camino opuesto.


El choque con el Plan de Ordenamiento Territorial (POT)

El Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá plantea una ciudad sostenible, resiliente y verde. No obstante, la construcción de un metro elevado rompe esa visión de ciudad planificada, y lo hace en varios sentidos:

  1. Contradicción con la conservación urbana: la megaestructura entra en conflicto con sectores de valor patrimonial y de interés paisajístico.

  2. Rigidez para la expansión futura: una vez construido, el corredor elevado limitará la capacidad de transformación urbanística de las zonas adyacentes.

  3. Fragmentación ambiental: la obra interrumpe la conectividad ecológica, impactando aves, fauna urbana y el arbolado.

En otras palabras: la decisión no solo afecta la movilidad, sino que compromete décadas de planificación territorial.


Un error que Bogotá no puede ignorar

El metro elevado de Bogotá no es simplemente una solución de transporte; es una decisión política con consecuencias paisajísticas, ambientales y sociales irreversibles. Los beneficios económicos de corto plazo no pueden compararse con el daño a largo plazo en el paisaje urbano, la salud de los ciudadanos y la coherencia del Plan de Ordenamiento Territorial.

Las grandes capitales del mundo nos demuestran que el futuro está bajo tierra, no sobre nuestras cabezas. Un metro subterráneo es costoso, sí, pero garantiza armonía urbana, sostenibilidad y respeto por el paisaje. Bogotá todavía puede reflexionar si este es el camino que quiere seguir: ¿ser una ciudad que aprende de las experiencias globales o una que condena su paisaje a la sombra de columnas de concreto?


En Coral Infauna creemos que la planeación urbana y la movilidad deben construirse con una visión de sostenibilidad, respeto por el paisaje y coherencia con el Plan de Ordenamiento Territorial.

Nuestro equipo ofrece consultoría ambiental y urbana especializada en:

  • Evaluación de impacto paisajístico y urbano.

  • Planes de manejo ambiental en grandes proyectos de infraestructura.

  • Gestión sostenible de recursos hídricos y ecosistemas urbanos.

  • Asesoría en ordenamiento territorial y normatividad ambiental en Colombia.

Si su entidad, comunidad o empresa busca tomar decisiones responsables frente a los retos de movilidad y urbanismo, contáctenos en Coral Infauna.

Juntos podemos construir una Bogotá que avance en infraestructura sin perder su riqueza paisajística ni comprometer su futuro ambiental.

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Impacto de los cultivos ilícitos y su procesamiento en el ambiente (suelo, agua y aire) y en la salud humana: una mirada crítica desde Colombia al mundo

Cada hectárea de coca sembrada en Colombia es una herida abierta en la tierra. No se trata solo de un cultivo ilegal, sino de un proceso que...